sábado, 27 de março de 2010

Semana Santa


El origen de la Semana Santa el cristianismo primitivo remoto. En el momento de los Apóstoles celebrarse sólo a viernes y el sábado, dos días ", cuando el esposo se lo llevaron" (Dalbosco, 1963, p. 393), la expresión del Bautista, aplicado por Tertuliano, y más tarde agregó a el miércoles, "cuando los Judios comenzaron las intenciones perversas de traicionar al Señor" (Dalbosco, 1963, p. 393), en las palabras de San Pedro Alejandrino. Para los 247 años todos los días de Semana Santa fueron empleados en la preparación de la Pascua.

Por fin hemos observado con estricto ayuno relojes de la noche, que incluyen lecturas, cantos, sermones y oraciones. En tiempos de León I (440-461), los días litúrgicos fueron la cuarta y el jueves. Con el Papa Hilario, quien murió en 468, fue que comenzaron a celebrar la misa el lunes y el martes. Nunca se admitió que el Santo Sacrificio el viernes y el sábado.

Estamos en el momento de la Pasión. La semana pasada nos ha ayudado a entender un aspecto del drama íntimo a través del cual fueron rescatados, "Jesús rechazado por su pueblo y para nosotros" (Dalbosco, 1963, p. 393). La Semana Santa también puso en evidencia el drama violento de la Cruz. La Misa del Domingo de Ramos, con sus canciones, la manifestación patética del sufrimiento de Cristo y sus lecturas, es una celebración de la Pasión y la Cruz.

Tengamos cuidado, sin embargo, pretender una conmoción inquieto. Celebrar un misterio inseparable de la de la Resurrección y la Ascensión. "Era necesario que Cristo padeciera" (Dalbosco, 1963, p. 393); "pero sabemos que fue la manera que tenía que ir a" entrar en su gloria "(Dalbosco, 1963, p. 393) y abierto en sus puertas.

Por esta razón, la Iglesia, el decreto para la reforma de la Semana Santa, insta encarecidamente a participar en las funciones sagradas a fin de reembolsar el testimonio público de nuestro amor y gratitud a Cristo Rey

Faria Marcos Vinicius de Moraes

Bibliografía

Gramaglia, fr. Ireneo; Dalbosco, fr. Pascoal. Misal Romano. 3 Edición. São Paulo: Pauline Editores, 1963.

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